martes, 19 de abril de 2016

No pudo sorprender


El Plásticos Magonsa Villamuriel no pudo sumar 
ante uno de los gallitos de la categoría, un GCE Villaralbo que necesitaba ganar para seguir dependiendo de sí mismo.
A pesar de la derrota, los palentinos dieron una buena imagen en defensa, desbaratando las llegadas locales pero ofrecieron pocas prestaciones en ataque algo que pagaron con la derrota. Otro dato positivo del encuentro fue el debut del juvenil David, que tuvo minutos en el Fernández García.

El equipo de Francisco Olea, como una semana antes contra el líder, no se arrugó en ningún momento e hizo valer su trabajo en defensa por encima de cualquier otro factor. A pesar del buen juego interior que demostró el Villamuriel y su contundencia a la hora de repeler el peligro, eran los locales los que llevaban la batuta de un ataque que se fue animando con el paso de los minutos.
Una gran arrancada de Gallego, un buen balón que puso Mato hacia Tejedor pero que cortó un defensa o un disparo envenenado de Bruju que se fue por pocos centímetros dejaban patente la intención villaralbina ante unos palentinos que tuvieron aproximaciones pero menos claras. Lo más destacado fue un buen disparo de Javichi que acabó en las manos del portero. El viento racheado también tomaba protagonismo, propiciando errores en el control que pudieron salir caros.


El GCE Villaralbo salió en la reanudación dispuesto a sentenciar por la vía rápida y Manu Arias, con un gran cabezazo pudo hacerlo pero Sevi terminó por enviar a córner, e instantes después fue Garban quien probó suerte aunque el esférico se fue por encima del travesaño.
Los de Tornadijo habían salido con una marcha más ante un Villamuriel más desajustado que en el primer acto lo que llevó a su entrenador a empezar con los cambios. El encuentro se había convertido en un monólogo zamorano pero la suerte no estaba acompañando a los locales. Y es que Garban volvió a tener un gol claro que, de nuevo, se fue alto.


Parecía que el tanto zamorano debía llegar en cualquier momento y por fin apareció cuando tras un rechace Bruju empalmó el balón para enviarlo al fondo de la red, imposible para el cancerbero.
Los villaralbinos buscaban el segundo mientras que el Villamuriel convirtió a Juanjo en un convidado de piedra hasta que Sáez protagonizó el primer intento de la segunda mitad con un tiro que fue por línea de fondo aunque fue prácticamente la única oportunidad puesto que les costaba cruzar los tres cuartos de campo.
La tensión fue creciendo en gradas y césped, sobre todo cuando los visitantes reclamaron un penalti sobre Diego Valencia que el colegiado del encuentro no consideró. El encuentro hacía aguas y Ballesteros trató de poner la guinda con un disparo que finalmente no pudo modificar el marcador (1-0).

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